«Lo mejor que puedes hacer es cometer un error, pues de la perfección no se aprende nada», sabias palabras de Elon Musk.
Y de esta frase podemos sacar un claro ejemplo en la presentación de su nuevo vehículo que aseguraba vidrios irrompibles pero no fue así.
Elon Musk no tiene miedo a los errores, no por nada ha llegado a donde está. Podrá ser criticado pero es un claro ejemplo de sus palabras.
Vamos que tampoco decimos que vivas cometiendo errores pero si que no tengas miedo a cometerlos. Porque puedes hacer un sensacional análisis y haber analizado todas las aristas posibles de una empresa pero un pequeño error termina por minimizar las ganancias de tu inversión. Y esto es porque nada en los mercados financieros es estático ni mucho menos perfecto. No hay activos infalibles ni soluciones mágicas. Todo tiene un pequeño margen de error del cual no debemos asustarnos sino saber lidiar con ellos al enfrentarlos.
Ahora que eres joven y tienes todo el tiempo del mundo, un error no será de gran cuantía si sabes resolverlo y aprender de ello. Vamos que los errores están para que aprendamos no para que los cometamos una y otra vez como si fuera un deja vu interminable. El tiempo es uno de los activos más preciados y cuanto antes empieces a invertir más posibilidades tendrás de triunfar.
Los errores forman parte de la vida así que cuando te tropieces con uno no te asustes ni te enfades, solo analiza porque llegaste hasta ahí y encuentra una solución para resolverlo.
Recuerda, los mercados estarán ahí con el pié puesto en posición para que caigas, la experiencia te hará más sabio y podrás esquivarlos para ir a por la rentabilidad deseada.